sábado, 23 de abril de 2011

Espectáculos naturales y algo más

Ni parece cuánto tiempo ha pasado ya. Tanto que esperaba los rayos y sin querer, pasó el frío, el calor y el viento,… cuando otra vez vuelve a llover. Como ya tiene mucho tiempo que no me asomo por acá (por falta de tiempo) nuevamente les vengo a compartir una serie de fotografías que he recopilado. No son todas puesto que sería exagerado mostrárselas, sino mas bien, son las que a mi consideración merecen ver.

Como mencioné en un principio, ni parece que ya volvió la temporada de lluvias, es de observar que se adelantaron tal como me lo pronosticó un señor. No he tomado alguna de los preciosos y refulgentes rayos, pero tengo la Imagen01, donde se puede apreciar cómo se deja caer la lluvia por los rumbos de la colonia Efraín A. Gutiérrez.

Imagen01. Temporada de lluvia.



Imagen02. Cielo empedrado de nubes.



Y qué decir de los espectaculares amaneceres que se nos regala con el cielo nublado tal como en la Imagen02. Y bueno no es lo único, sea con o sin nubes, los amaneceres tienen lo suyo como la Imagen03.


Imagen03. Amanecer despejado.






Imagen04. Pradera de musgos.


Ah, pero a la naturaleza no le basta mostrarnos espectáculos a nivel macroscópico, pues además nos regala vistas milimétricas. Las cuales pasan desapercibido a no ser que uno disponga de acercarse lo más que se pueda para apreciarlos tal como en la Imagen04, 05 y 06.


Imagen05. Pastito de musgo.





Imagen06. Un mundo de musgo.


Tod@s saben que que las flores son hermosas. Sea por su color, su forma, su olor o su tamaño; pero ¿se han acercado aun más para ver qué se encuentra a unos cuantos centímetros de ellas? Bueno, no todas, ya que hay algunas de las que nos perdemos de grandes diseños si no nos acercamos lo suficiente. Como por ejemplo de la Imagen07 puedes observar un diminuto ramo de novia.




Imagen07. Mili ramo de novia.





Imagen08. Florecilla amarilla.

Aun hay muchas diminutas flores, que no van más allá de los 5 a 10 milímetros de diámetro; pero solo les muestro las que tuve a la mano y oportunidad de tomar como en la Imagen08, 09y 10. De las cuales puedo decir que la flor más olorosa es el Narciso, y de los más sutiles aromas están en las de la Imagen07 y 08 (lamento no saber el nombre de todas las flores).



Imagen09. Violetitas.







Imagen10. Narcisito.


Por otra parte; ¿quién no ha disfrutado de ir a un río a nadar? Bueno, disculpen algunos de ustedes pero estoy seguro que la mayoría de los que vivimos en Chiapas hemos sentido el correr del agua a través de nuestras piernas, las piedritas en nuestros dedos y disfrutado de un buen chapuzón en agua fría o fresca. Y bueno, a pesar que a Berriozábal le tocó perder su principal río que nacía de “La Represa”, aun en temporada de lluvia nos toca disfrutar de los afluentes intermitentes llenados por las aguas que descienden desde las montañas [ver Imagen11].



Imagen11. Río cristalino.





Imagen12. Piecitos mojados.

Ríos donde los niños disfrutan [Imagen12] de un espectáculo pocas veces posible de visitar. En un río de puedes refrescar. Pero no es la única alternativa de alejarnos u olvidarnos por un instante del calor que podemos sentir en ocasiones. También hay cocos que venden en el parque central, donde seguramente podemos disfrutarlos tanto como la niña de la Imagen13.




Imagen13. Rico coco.







Imagen14. Puesto de chopos.


Además, si no andamos de ánimos para tomar agua de coco; pues para eso están los chopos y los raspados [ver Imagen14 y 15, respectivamente]. Los chopos ahora son conocidos como nieves, pero eso probablemente se deba a una influencia exterior y la “modernización” del lenguaje.


Imagen15. Carrito de raspados.






Imagen16. Rico elote.

Y a la mejor después de tomar un agua de coco o de disfrutar un chopo o raspado, se les antoje algo de comer. Pues en el mercado se pueden hallar empanadas o tacos fritos, pero si desean algo más ligero, a la mano seguramente encontrarán un elotito para degustarlo como al pequeñín de la Imagen16.

Agradezco a Dios tantas cosas bellas que nos permite tener a nuestro alrededor, y en especial a los niños (seres indefensos qué proteger), los cuales tienen un gran tesoro que seguramente ha perdido la mayoría, llamado… inocencia. Me es grato mostrarles esta ronda de imágenes, para darles a conocer pequeños detalles que hay en Berriozábal y no únicamente aquí, sino en Chiapas y en varias partes del mundo. Así pues, me despido no sin antes pedirles, que amen a la naturaleza, ámense a sí mismos así como a los demás, y no dejen para mañana lo que pueden hacer hoy.









PD: todas las imagenes las redusco para que suban rápido, pero las subo de buena calidad; si alguno desea las originales y en especial para un trabajo, sólo pido que se me den los créditos. ¡Nos vemos!