Crónica del transporte de pasajeros

El primero de los camiones acondicionados par pasajeros y carga llegó en 1932, era propietario del Sr. Carlos Castineyra, hombre de negocios de la ciudad de Tuxtla; el conductor, un joven de nombre Alejo, diariamente hacia un solo viaje a Tuxtla saliendo a las ocho de la mañana para regresar a las tres de la tarde, en virtud de que l carretera de terracería estaba en malas condiciones y era la misma por donde viajaban las carretas, en el tiempo de lluvias no era transitable por lo que se suspendían los recorridos para reanudarlos cuando mejoraban las condiciones.

Al año siguiente, el Sr. Virgilio Cervantes, originario de Chiapa de Corzo, llevó un nuevo camión semejante al que ya estaba en servicio; con éste hacía un viaje diario a las nueve de la mañana y regresaba a las cuatro de la tarde; estas unidades dieron un servicio muy irregular hasta 1936; después de esta fecha fueron sustituidas por otros vehículos más pequeños que resultaban de la adaptación de un automóvil estándar, cortándole el capacete para dejarle una cabina chica para el conductor, eliminando las sillas traseras formaban una góndola en la cual instalaban dos bancas, una a cada lado para los pasajeros dejando la entrada en la parte trasera, llevaban un toldo de lona y cortinas a los lados, en estas unidades cabían 10 personas y sus equipajes. Entre los primeros dueños de estos nuevos transportes estaban los señores Alfredo Castañón Gamboa, que el poco tiempo de uso lo vendió a Fidel Ríos Aguilar, César Pastrana, Eutimio Yáñez, Armando Selvas y Adán Sarmiento; como los dueños de estas unidades no lo consideraban un negocio productivo, las vendieron con los que a su vez hicieron lo mismo, hasta que llegaron a manos de los hermanos Eduardo y Manuel Gutiérrez Gómez y Fidel Ríos Ovando, tuvieron un periodo estable y prosperaron visiblemente ya que ellos mismos eran los dueños y conductores; adquirieron una por una tres camionetas con carrocería de madera construidas especialmente para servicio de pasaje con cupo para diez personas, después de trabajarlas por largo tiempo adquirieron autobuses grandes y cómodos uno por cada quien. En 1980 los hermanos Eduardo y Manuel Gutiérrez Gómez y Fidel Ríos Ovando que ya eran los únicos concesionarios del transporte en la población, constituyeron la Sociedad de Autotransportes Berriozábal-Tuxtla S.A. de C.V., comenzando por aumentar sus unidades, adquirieron diez combis para la misma ruta, las trabajaron por algún tiempo, pero una disposición de Secretaría de Comunicaciones y Transportes que ordenaba el cambio de autobuses por unidades más pequeñas les forzaron a venderlas y adquirir microbuses reglamentarios. Por la liberación del autotransporte en el país, optaron por aceptar socios en su organización aumentando su número a 24 microbuses en servicio, de color verde y amarillo.

Aprovechando esta liberación del autotransporte se formaron en la población tres sociedades más de microbuses y una de combis para el transporte urbano.

Una línea de microbuses se denomina Transportes Felipe Berriozábal, la cual contaba con 16 unidades de color azul; la otra sociedad, con transportes de color blanco y rojo clausuró sus actividades y sus camiones ingresaron a otras líneas. Poco a poco la población aumentó y el servicio urbano contaba con 12 combis que atendían la demanda.

Actualmente; el año 2008 es testigo del crecimiento considerable de los últimos años en la población y su progreso; tanto así que las rutas Berriozábal-Tuxtla (y vicerversa), cuentan con 45 unidades. Treinta de la ruta San José (recorrido al lado sur) de color verde, y gravados de distinto color. Quince unidades pertenecientes a la ruta Bodega (recorrido al lado norte), de color azul y gravados, o blancos con líneas azules. Las tres líneas (‘Autotransportes de Pasaje San José’, ‘Transportes Felipe Berriozábal’, y ‘Autotransportes Berriozábal’) conforman ‘La Sociedad de Autotransportes Coordinados de Berriozábal’.

Como la demanda también ha aumentado dentro de la población; el pueblo cuenta actualmente con cinco rutas de colectivos, con un total de 20 unidades.